Por
Lily Schonhaut- Zales
“Educa al niño en su camino, y cuando crezca no se apartará de él” (Mishle 22:6)
El Rab Zeev Karov explica que el objetivo del Jinuj es ayudar al niño a descubrir su potencial, que lo distingue de cualquier otra persona y le permite traer luz al mundo.
Shlomo Hamelej nos enseña que nuestro rol como padres es incentivar a cada hijo a avanzar en su camino.
Cada hijo es único y necesita que lo guiemos para avanzar en esa dirección. Por eso es importante que no tratemos a todos nuestros hijos de la misma manera, sino que busquemos qué es lo mejor para cada uno de ellos.
Porque aunque sean hermanos, cada uno tiene un potencial que lo identifica y que lo hace especial.
En el momento en que tenemos expectativas, que sean artistas, médicos o deportistas, o quizás que sean sociables, exitosos o buenos alumnos, los estamos llevando por un camino que no necesariamente es el de ellos.
Si logramos comprender su voz interna que nos va mostrando cuál es su interés en la vida, vamos a poder encaminar esos intereses en una dirección positiva.
Para eso tenemos que estar seguras de nuestro liderazgo y de que nosotros tenemos claridad en temas que ellos aun no, mientras que respetamos su potencial y lo que los distingue y los hace únicos y distintos a mí.
Busquemos llevar a cada uno de nuestros hijos por su propio camino, guiándolos y dándoles la mano para ayudarlos a desarrollar su potencial.
De esta forma podrán llegar a la vejez y sentirse plenos en el camino que eligieron caminar, de la mano de sus padres.
En Elul nos enfocamos en la teshuva.
Teshuva se podría traducir como arrepentimiento, pero la traducción literal de esta palabra es retorno.
Retornar a Hashem, al camino único que Él trazó para mí.
Teshuva es crecer, es lo opuesto a estancarse.
Y eso es lo que queremos para nuestros hijos.
Como escribe el Rav Jonathan Saks “La teshuva es nuestro satélite de navegación, que nos da una dirección en la vida”.
Te invito a ver tu rol de padre como el de un guía que lleva a su hijo a caminar en el camino único que Hashem trazó para él, basado en sus virtudes y pasiones.
Con mucho cariño, Lily