Papá, mamá y los niños, todos estamos participando en los preparativos para el jag.
Este jag!!! Me hace sentir tan!!! bien.
El trabajo comienza con el vino… Las uvas vienen en cajas grandes, de diferentes colores: verdes, rosadas, negras…
Todos juntos, es la diversión,… juntos, trabajando haciendo el vino para todo el año, realmente como hormigas.
Papá me lleva al granero, no recuerdo quién más viene, recuerdo que estoy allí.
Veo el proceso de la ordeña, emocionándome una y otra vez.
Llenamos el recipiente con leche, lo llevamos a la casa para que mamá haga los preparativos.
Mamá hace queso blanco, manteca, todo especialmente para Pesaj.
El recuerdo mas maravillosos a mis ojos es….. juntos!!!!
Los olores, el ambiente de regocijo.
No conocíamos la agotadora experiencia de ir al supermercado, revisar la kashrut de los productos, el desorden en los estantes, la multitud atestada. Abundancia que a veces nos provoca sentimientos encontrados.
Todo se hace en casa. Todos juntos una maravillosa experiencia, un ambiente tan especial.
Toda la casa recibió un brillo especial de nuestra energía, de la alegría por la fiesta de Pesaj que ya llega.
El orden en si realmente no me acuerdo, tampoco jol hamohed.
Lo que está claro dentro de mí, lo que el corazón contiene y siente hasta el día de hoy es la emoción hacia.
En esto días que estamos en la víspera del jag escucho conversaciones tanto dentro de mí como en mi alrededor, palabras que expresan cansancio, fatiga.
“Qué hacer y qué no necesito” …. “Cuánto he hecho y cuánto más falta por hacer” …..
¿A dónde se nos fue la excitación?
Una vez tuve una conversación llamada “tanto así”.
El taller trató principalmente sobre la influencia de los patrones de pensamiento.
Creencias e ideas de la infancia, de nuestras experiencias de vida, que nos guían en el día a día.
¡Así es! “Tánto así”
Este efecto puede hacernos olvidar los sentimientos de excitación, el poder creativo en la imaginación, los preparativos con alegría en el corazón, especialmente el “para qué”
El razonamiento, la conciencia nos lleva a la crítica y al juicio, a la ira y al sentimiento de culpa, cuando no alcanzamos el nivel que nos propusimos.
La verdadera libertad, la elección del pensamiento, ¡esto es yetziat mitzraim!
Entonces, ¿cómo hacen eso que me preguntan una y otra vez?
¡Toma una decisión! no te rindas
Levántate por la mañana con una declaración de agradecimiento. También si dormiste o no.
(A veces me digo: dormí muchas veces. ¿Es positivo no? 🙂
Reza con intención la tefila de Birkot Hashajar: “Hanoten le ayef koach”
Durante el día mira lo que ya has hecho. Dite a ti mismo palabras de agradecimiento, palabras de amor.
Anda al espejo cada dos horas (poner alarma a un reloj ) mírate a los ojos
Sonríete a ti mismo y recuerda decirte que estás haciendo lo mejor que puedes.
Bebe mucha agua, siéntate muchas veces al día y haz un ejercicio corto para relajar el cuello y los hombros.
* De vez en cuando también es posible un trozo de chocolate ?
El cuerpo te habla, ¡escúchalo!
Asume la responsabilidad, tu puedes dirigir los pensamientos que te apoyan. ¡Así sales a la libertad! BEH
Que seamos todos BEH merecedores de liberarnos y salir de nuestro mitzraim interno.
Estoy aquí en caso de que necesites más apoyo
Jag Kasher vesameach
Cariñosamente
Miriam Govezensky
WhatsApp: +972 54 202 2750 Email: mgvezensky@gmail.com