APRENDIENDO A NADAR

Andrea Leinado

Dos personas se encontraron en un viaje en barco. Una de ellas era un reconocido profesor universitario y experto en varias materias. El otro un simple y casi inculto comerciante. En el curso de la conversación el profesor quizo saber en cuales áreas de la vida era experto este comerciante.

-Tenes conocimientos de física?

-No ningún conocimiento, contesto el hombre

-Entonces tenes perdido el 25% de tu vida le contesto el profesor.

-Tal vez entonces seas experto en filosofía?

-Tampoco de filosofía tengo conocimientos dijo el comerciante.

-Que lastima! Entonces tenes perdido el 50% de tu vida le dijo el profesor.

– Ya se! Sos experto en matemáticas y astronomía?

-No se nada de ninguna de las 2 materias, se disculpo el hombre

-Definitivamente tenes perdido mas del 80% de tu vida!! Le costesto el profesor

De repente sintieron un gran ruido y una gran turbulencia comezo a hacer que el barco se inclinara para uno y otro lado.

El profesor preso de un ataque de pánico no sabia para que lado correr, cuando este hombre simple le pregunto : Porque tenes tanto miedo? Acaso no sabes nadar?

No ¡!! contesto el profesor, esa es una de pocas habilidades que no tengo!!!

Lo lamento dijo el comerciante, si eso te falta tenes casi el 100 % de tu vida perdida!!!

Y todos tus extraordinarios conocimientos en este momento no te sirven para nada.

Que no quiero decir y que si quiero decir a raíz de esta historia?

No quiero decir que no hay que estudiar y prepararse. Definitivamente el área academica es muy importante en la vida de las personas.

Lo que si quiero decir es que eso solo no alcanza. Todos debemos tener además habilidades, herramientas y recursos que nos permitan nadar en las aguas revueltas y también en los mares calmos de la vida.

Albert Einstein dijo “EDUCACION ES LO QUE QUEDA CUANDO TODO LO QUE HEMOS APRENDIDO EN LA VIDA SE NOS HA OLVIDADO”.

Es necesario que podamos contar con los medios para poder discernir lo que esta bien de lo que no lo esta, aprender a identificar emociones para poder tener relaciones sanas, a diseñar conversaciones, a manejarnos con respeto, amorosidad y empatia para con los demás. Estas son las herramientas que también van a determinar el éxito de una persona.

Cada ser humano es único e irrepetible y la función que tiene en el mundo es irremplazable. Pero todos tenemos dentro nuestro las herramientas y habilidades necesarias para poder nadar en aguas turbulentas y tambien en aguas calmas. La vida nos va a enfrentar con varias situaciones, por eso debemos siempre preguntarnos que podemos estar haciendo para mejorar el mundo de Hashem.

Muchas veces nos va a paralizar el miedo, otras vamos a sentir enojo y resentimiento, tal vez escuchemos una voz dentro nuestro que nos habla de la culpa. Podemos estar siendo personas exigentes para con nosotros y con los demás y podemos no estar viviendo como realmente queremos y merecemos.

Siempre estamos a tiempo de aprender a nadar. Siempre es buen momento para comenzar a elegir la persona que quiero estar siendo.